Hay quienes proponen aumentar las penas para disminuir la incidencia de criminalidad en nuestra sociedad. ¿Sería ésta una medida efectiva? Permítame exponerle algunas ideas:
Para imponer una pena es necesario un proceso penal, y para ello, se requiere tener a una persona detenida; el problema a nivel social no es entonces de cuántos años de pena se impondrá a esa persona, sino cuantas personas de las que delinquen llegarán realmente a compurgar una sentencia justa; porque en materia de justicia el orden de los factores sí altera el producto: no es lo mismo condenar a una persona por 100 años, que condenar a 20 personas por 5 años. En otras palabras, el quid de la cuestión justiciable no es cuántos años de castigo se impongan un responsable, sino a cuántos responsables realmente se castiga [sigue]
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